Visita al pediatra de los 2 meses

Hoy hemos tenido la visita al pediatra de los 2 meses.

Nuestro pediatra es muy majo, un hombre con mucha paciencia y buena mano con los niños. La consulta es luminosa, y con dibujos de colores en las paredes y en las puertas. Dibujos dedicados de niños decoran las paredes de la consulta. Son unas instalaciones un tanto viejas, pero a las que han sabido sacar partido.

Hemos llegado un poco pronto, y el peque no estaba de demasiado buen humor. Unos pucheros y unos intentos de lloro más tarde, se nos ha quedado dormido en brazos mientras esperábamos. Cuando nos ha tocado entrar estaba dormido como un tronco, no había manera de despertarle. Al dejarle desnudito se ha despertado de repente, echo una furia.

Le ha hecho una revisión completa, examinándole el corazón, el oído, medir y pesar, …

Le ha encontrado una pequeña hernia en el ombligo, que en principio no es importante y debe irse por si sola antes de los 4 años.
Nos ha comentado que la mancha que lleva en el culete es una mancha mongólica, que no es nada y es normal. Curiosamente, ni su papá ni yo habíamos sido conscientes de esa mancha hasta hoy mismo. No es que se vea demasiado, pero me sorprende no haberla visto hasta ahora porque sí que se nota. Está bien que nos lo haya comentado, porque sino si algún día nos diéramos cuenta sin saberlo nos habríamos llevado un susto por no saber de dónde había salido eso.

Luego, el tema de los vómitos. Hasta ahora parecíamos los padres histéricos que se quejan de que su niño vomita un poco. Pero hoy el peque ha entrado en acción en plena consulta. 5 vómitos en total, bastante grandes, en lo que ha durado la consulta. El pobre pediatra no paraba de cambiar el papel de la camilla, aunque le decíamos que lo dejara, que no pasaba nada por que estuviera un poco vomitado, porque si ponía uno nuevo no iba a durar nada. De todos modos nos ha dicho que si fuera un problema grave no habría cogido el peso que ha estado cogiendo (36 gramos al día de media!, una barbaridad). Aun así, como sí que son llamativos esos vómitos tan abundantes, nos ha mandado hacerle una ecografía para valorar el píloro, por si acaso fuese algo a tener en cuenta.

Y luego hemos pasado a la consulta de enfermería. Le tocaba vacunar, y se ha llevado 2 pinchazos en total, uno en cada pierna. Le han pinchado a la vez, una enfermera por cada lado, para que fuera sólo un susto y no dos. Pobrecito, qué cara ha puesto, y menudo enfado. Aun así, el sofoco ha durado apenas un momento, y al salir de la consulta ya se le había pasado y estaba tranquilo. Parece que no le han hecho reacción las vacunas, y esta tarde está la mar de tranquilo.

Tenemos que seguir con la vitamina D y lo mismo que hasta ahora: teta, paseo, baño,…

La próxima visita será a los 4 meses, esta vez con las enfermeras.

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