Nuevas destrezas – 3 meses y 3 semanas
Este último fin de semana parece que le ha sentado al peque fenomenal. Y es que de repente ha hecho cambios muy vistosos en sus destrezas de bebé.
Por un lado ya le llaman la atención las cosas que dejamos a su alcance, y las coge. Hasta ahora apenas le llamaba la atención nada que no fueran las manos de sus papás. Y cogía cosas, pero tenía la mano demasiado loca y no controlaba qué hacía con ellas, como mucho conseguía meterse el mordedor en el ojo, o se estiraba de la cadena del chupete mientras se mosqueaba porque se le salía de la boca. Ahora coge los juguetines que dejamos cerca y si hacen ruido al moverlos se queda un ratito mirándolos y explorándolos. Y cuando comemos con él en las rodillas no para de agarrarnos la comida o meter la cara en el yogourt en cuanto nos despistamos un poco. Lo mismo pasa con los tablets y ordenadores, que le llaman poderosamente la atención y ¡zasca! mete la mano, así que de repente nos damos cuenta de que hemos escrito unas tonterías…wdsocn.,.wewesdhnxchowdsa
El otro cambio es que se ha enamorado de su voz. Hasta ahora hacía gorgoritos, pero ahora grita y se emociona al oírse, y hace algo como «cantar» y se pone contento cuando se escucha. Si vamos a algún sitio muy bullicioso se pone a cantar y gritar hasta que no puede más y termina agotado.
También se ha descubierto la lengua. Pasó un día entero venga a darle vueltas, que parecía que llevara la boca llena de cosas o que se le fuera a caer la dentadura postiza. Dale que te pego a la lengua…
Y la última es una habilidad que encuentro totalmente prescindible… Y es que ha aprendido a sacar la lengua mientras grita y hace una especie de sonidos guturales. La cosa está bien, y al principio hasta nos hacía gracia. El problema, como con todo, es el momento. Y es que el pobrecillo nunca encuentra el momento adecuado para dejar ver sus nuevos descubrimientos, y nos los encontramos a las 3 de la mañana gritando como un loco todo emocionado, o cuando encontramos a un conocido se pone a sacarle la lengua mientras hace sus gruñidos pertinentes.
En fin, que ya veis que estamos la mar de divertidos. ¡Me encanta!